La sala capitular del Monasterio de la Oliva acogió el viernes, 19 de agosto, una puja “muy especial”. Se subastaban las 34 barricas donde guardará reposo la uva de la próxima vendimia que recojan los monjes que todavía habitan este lugar lleno de historia. En total, se trata de un trabajo lleno de paciencia y cuidado por los detalles que esta comunidad cisterciense realizar en las veinticuatro hectáreas que son de su propiedad.
Tras un período de crianza de no menos de 14 meses, el vino será embotellado, ya en la primavera de 2017, en las barricas que se subastaban el viernes a un precio de salida de 2.900 euros. Dicha barrica, por cierto, tiene capacidad suficiente como para producir unas 288 botellas por lo que el precio final apenas alcanza los 10 euros por botella, sin incluir el IVA.
Una delegación de la Academia Navarra de la Gastronomía se trasladó ex profeso a este encuentro donde, aparte de saludar a grandes amistades y disfrutar de una velada en torno a uno de nuestros productos más emblemáticos, el magnífico Vino de Navarra, adquirimos uno de los lotes sorteados durante la cita que utilizaremos para entregar a nuestros socios y como regalo institucional en todos aquellos eventos, citas y actividades que organicemos en favor, siempre, de lo mejor de nuestra gastronomía navarra.
